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¿Te sientes abrumado y estresado en el trabajo? ¿Te resulta difícil concentrarte? Si es así, es posible que estés experimentando ansiedad laboral.
La ansiedad laboral es aquella relacionada específicamente con el lugar de trabajo. Puede provocar una amplia gama de síntomas, como estrés, tensión, preocupación, miedo y pánico. Si no se trata, puede tener una serie de consecuencias negativas, como la disminución de la productividad, la insatisfacción laboral e incluso la pérdida del empleo. En esta entrada del blog, hablaremos de todo lo que necesitas saber al respecto para entender un poco mejor lo que quizás estés pasando.
La ansiedad laboral, como su nombre lo indica, es un tipo de ansiedad específica con nuestro trabajo. Está asociada a las preocupaciones reales o anticipadas sobre nuestra vida profesional. Pensar en un acontecimiento laboral próximo, como una presentación o una fecha límite, puede desencadenar sentimientos de ansiedad.
Para algunas personas, la ansiedad laboral es una presencia constante que puede interferir en su capacidad para rendir bien en el trabajo.
Una causa común es el perfeccionismo. Cuando nos fijamos normas poco realistas, puede ser difícil cumplirlas y esto puede provocar sentimientos de ansiedad.
Otro factor que puede contribuir a la ansiedad laboral es la falta de control sobre nuestro entorno o situación laboral. Si sentimos que no tenemos poder para tomar decisiones o gestionar nuestro propio tiempo, esto también puede provocar ansiedad.
También la inseguridad laboral, es decir, el miedo a perder nuestro trabajo puede ser una fuente importante de ansiedad laboral.
Otro factor que puede contribuir es el miedo al fracaso. Esto puede ser especialmente cierto si sentimos que nuestro trabajo está en juego.
Aunque es normal sentir cierto grado de estrés en el trabajo de vez en cuando, la ansiedad laboral puede interferir en tu capacidad para realizar tu trabajo y puede conducir al agotamiento.
Por eso es importante hacer una aclaración:
Es importante tener en cuenta que la ansiedad laboral es diferente del estrés. El estrés es una respuesta normal a la presión o a las exigencias del trabajo. Todo el mundo lo experimenta de vez en cuando.
La ansiedad laboral, en cambio, es una forma excesiva y persistente de estrés que puede tener un impacto significativo en tu vida.
Ahora hablemos de las manifestaciones de la ansiedad laboral para que podamos conocer más al respecto.
Los síntomas pueden variar de una persona a otra. Para algunos, la ansiedad laboral puede manifestarse con síntomas físicos; para otros, los signos son mentales, y hay quienes muestran cambios de comportamiento.
Algunos de los signos y síntomas más comunes son los siguientes:
Si no se trata, la ansiedad laboral puede tener una serie de consecuencias negativas, tanto en el trabajo como en tu vida personal:
Por eso resulta sumamente importante identificar cuando empiecen la sintomatología, para poder hacer algo al respecto. Antes de hablar sobre cómo gestionar la ansiedad laboral, expliquemos algunos tipos que existen.
Son miedos intensos a cosas o situaciones concretas que pueden darse en el trabajo, como las alturas, volar o conducir.
Puede producirse tras un acontecimiento traumático en el trabajo, como ser víctima de la violencia o presenciar una catástrofe natural.
Ya que sabemos sobre los tipos de ansiedad natural, hablemos del punto principal de este post:
Hay una serie de cosas que puedes hacer para afrontar o controlar la ansiedad en el trabajo, pero, sobre todo, asegúrate de que te cuidas física y mentalmente. Así que no te olvides de:
También podemos intentar dar pequeños pasos para aumentar nuestro control sobre nuestra situación laboral. Esto puede consistir en pedir más responsabilidades en el trabajo o negociar un horario flexible.
De igual manera, es importante crear una red de apoyo de familiares y amigos que comprendan lo que estás pasando y puedan ofrecerte apoyo práctico y emocional.
Si crees que puedes estar experimentando ansiedad en el trabajo, habla con tu médico o con un profesional de la salud mental, para que te ayuden a diagnosticar y llevar el mejor tratamiento.
Hay algunas cosas que puedes hacer para prevenir la ansiedad en el trabajo:
Identificar tus desencadenantes es el primer paso para controlarlos. Una vez que sepas qué es lo que desencadena tu ansiedad, podrás desarrollar un plan para evitar o afrontar esas situaciones.
Habla con tus amigos y familiares sobre tu ansiedad y hazles saber cómo pueden ayudarte. Cuando te sientas ansioso, acude a alguien de tu red de apoyo para que te consuele y te tranquilice.
Las técnicas de relajación, como la respiración profunda, la relajación muscular progresiva y la visualización, pueden ayudar a reducir los síntomas físicos de la ansiedad. Practicarlas con regularidad te ayudará a controlar mejor la ansiedad cuando se produzca
El estrés es un desencadenante habitual de la ansiedad. Aprender a gestionar el estrés puede ayudarte a prevenir la ansiedad y a mantenerla bajo control.
Se ha demostrado que el ejercicio reduce el estrés, mejora el estado de ánimo y favorece la salud en general. Cuando te sientas ansioso, da un paseo enérgico o sal a correr. El ejercicio regular puede ayudar a reducir la frecuencia y la gravedad de los ataques de ansiedad.
La ansiedad puede verse exacerbada por la falta de sueño. Asegúrate de que descansas lo suficiente cada noche para reducir el riesgo de ansiedad.
Si estás viviendo con ansiedad, habla con tu médico para que pueda evaluar tus síntomas y ofrecerte opciones de tratamiento.
Cuando tienes ansiedad, es importante que te fijes objetivos realistas. Si una tarea te parece demasiado abrumadora, divídela en pasos más pequeños y manejables. Y no lo dejes para más tarde: empezar una tarea puede ser la parte más difícil.
Si sigues estas recomendaciones, la prevención será más factible. Recuerda que cada persona experimenta la ansiedad de forma diferente y que lo que funciona para una puede no funcionar para otra.
La ansiedad laboral es una condición real y seria que puede tener un impacto significativo en tu vida. Si crees que puedes estarla experimentando, habla con tu médico o con un profesional de la salud mental. Ellos pueden ayudarte a diagnosticar y tratar la afección.
Con el apoyo adecuado, puedes controlar la ansiedad laboral y llevar una vida sana y productiva.
Esperamos que este post te haya sido útil. Y si conoces a alguien que pueda estar pasando por un momento laboral así, por favor compártele este post. ¡Gracias!
