En este post te comparto qué hacer ante ellos... Ataque de pánico: mantén la calma.
Tu cuerpo está teniendo sensaciones y reacciones totalmente extrañas e intensas a la vez. Son desconocidas para ti, o quizás conocidas en cuanto a que llevas mucho tiempo presentándolas, pero eso no quita que sean atemorizantes.
Ahora, el que sean atemorizantes no significa que en realidad sean peligrosas. Es lógico pensar que sí, pues así se siente, pero esto en psicología se conoce como “razonamiento emocional”, o sea, que a partir de lo que sientes… concluyes.
Sé que se siente horrible y que pareces perder todo tipo de control, pero es necesario que empieces a creértela que no estás en peligro, que no perderás la razón y que no morirás.
Sé que ésta imagen te puede perturbar, y lo siento, pero es a propósito. Pues en el ataque de pánico a penas ves una imagen, te hablan de eso o escuchas algo relacionado y crees que están hablando de ti, o que lo que estás escuchando tiene que ver contigo, te lo tomas personal y lo relacionas y crees que porque te hace sentir eso entonces debe de ser verdad.
Acepta esas sensaciones que percibes al ver ésta imagen, y date cuenta que no pasa nada de que las sientas, simplemente obsérvalas y déjalas pasar.
Durante el ataque de pánico, cuando empiezas a pensar que estás perdiendo la razón, desmiéntete a ti mismo. ¿Cómo? fácil… te dices a ti mismo “si realmente estuviera perdiendo la razón no tendría conciencia de mi mismo, no podría hablar bien, andaría caminando desnudo por la calle o desorientado, probablemente ya estaría en un hospital psiquiátrico y haría cosas fuera de lo normal”.
Estoy segura que la locura solamente sucede en tu interior, realmente no sucede en el exterior, por eso es que has de estar seguro de que no te estás volviendo loco. Me consta que el camino hacia la locura es otro, las causas son otras, lo que tú tienes es mucha ansiedad y es un trastorno neurótico más no psiquiátrico.
El otro principal temor durante el ataque de pánico es que te estás muriendo, ya sea por ahogamiento o por un ataque al corazón. Cualquiera de estas dos cosas no sucederá, realmente el ataque de pánico no es causa de muerte. A las personas que les da un ataque al corazón simplemente les da, si tu estás en ese estado de temor nada más pensando sobre eso, no te dará.
Igualmente, por más que tu cuerpo sienta que se está ahogando, no te ahogarás pues el instinto de supervivencia es mucho mayor que tu miedo.
Y esto es muy importante, tu instinto de supervivencia es mucho mayor que tu miedo. Tu cuerpo quiere vivir y es infinitamente sabio para lograrlo, a pesar de las mentiras que pueda estar diciendo tu mente. Aquí te puedes decir “estoy a salvo, mi cuerpo funciona perfectamente, mi corazón late armoniosamente, respiro aire, siento el aire, estoy a salvo”.
Seguramente acompañado de todo esto viene acompañado el miedo de estar enfermo, de que vivirás toda tu vida con esta enfermedad, de que estás siendo casi casi castigado quién sabe por quién o por qué. Libérate de éste temor, pues realmente no sucederá.
Estás pasando por una crisis, más no significa que vas a vivir así toda tu vida. Si haces los cambios necesarios en tu vida, en tus hábitos, manera de interpretar la realidad y en cómo te tratas, no tendrías por qué volver a experimentarlo.
Esto es como un temblor o incendio donde te dicen que lo más importante es mantener la calma. Durante el ataque de pánico mantén la calma, ¿pero cómo? ¿si es un ataque de pánico?: Aceptando todo lo que sientes.
Deja de luchar contra las sensaciones, tampoco las hagas más grandes de lo que son, deja de pensar que porque ya empiezas a sentirte incómodo te está dando un ataque de pánico, acepta cada sensación tal y como es sin querer quitarla o combatirla.
Además, como un colega especializado en ataques de pánico dice: pídele más al ataque. O sea, ya estás ahí con las sensaciones horribles, pídele más, dile que quieres más, que si eso es todo lo que tiene. Esto hace que le pierdas el miedo y que inmediatamente empiece a disminuir.
Entonces, si realmente crees que no te vas a morir y que no te vas a volver loco, las sensaciones incómodas serán tan sólo eso, sensaciones incómodas. Más no te alarmarán y tampoco te angustiarán. Toma las sensaciones como lo que son y quítales el poder que les has dado de hacerte creer que estás en peligro.
Retoma el control de ti mismo, habla contigo mismo, sé tú quien define cómo sentirte ante cada momento, inclusive mientras que atraviesas la crisis del pánico. Confía en ti mismo y cree que eres capaz hasta de lo que parece imposible.
Yo sé que decir “mantén la calma” puede inclusive estresarte más… pero… es que es la realidad, hay que mantener la calma en lo que las sensaciones pasan, y yo estoy segura que si lo intentas lo puedes conseguir.